Las tareas se centran en medir la aptitud de resistencia del viaducto para lograr usar una grúa que levante el vehículo 29 metros
CERDEDO-COTOBADE (PONTEVEDRA), 27 Dic.
Los trabajos para intentar sacar del lecho del río Lérez el autobús accidentado en la noche del sábado en Cerdedo-Cotobade (Pontevedra) han arrancado en la mañana de este martes, en el momento en que se generarán las mediciones para valorar si el viaducto por el que se despeñó el vehículo es con la capacidad de soportar la carga sobre la infraestructura que implicará alzar el vehículo desde 29 metros de altura.
Desde las 08,00 horas de este martes está cortado el tráfico en las inmediaciones del puente de Pedre, por el que se precipitó en Nochebuena el autobús de la compañía Monbus en el que viajaban nueve personas, siete de las que han fallecido en el hecho.
Una vez concluido el operativo de búsqueda de las víctimas con la ubicación del cadáver de una mujer de 50 años en la mañana del lunes, las tareas se centran en este momento en la retirada del autobús, que continúa en el lecho del río en una región estrecha del curso del Lérez.
Por ello, la primordial vía para sacar el autobús accidentado --cuyo análisis va a ser clave para entender las causas del trágico hecho-- es usar una grúa para subir el vehículo 29 metros hasta el puente.
Durante la mañana, los obreros y especialistas vinculados al Ministerio de Transportes han instalado planchas en todo el viaducto para repartir la carga. A continuación, van a tener rincón las pruebas de resistencia del puente que, según las fuentes consultadas por Europa Press, podría hundirse hasta 15 centímetros por la fuerza que supone el difícil operativo.
Como explicó el encargado del Gobierno, José Miñones, el pasado lunes, la opción primordial es recobrar el autobús de manera íntegra pero, caso de que no resulte posible, no se desecha que deba recurrise a su fraccionado.
La bajada del cuadal del río Lérez tras el cese de las fuertes precipitaciones de la última semana facilitaría que, caso de que las pruebas de carga sean satisfactorias, logre procurarse la operación de levantado este martes. El propósito es no postergar la operación frente a la previsión de que las lluvias retornen este miércoles a la región.
Desde la mañana del lunes, bomberos y agentes de la Guardia Civil de Montaña han descendido hasta el autobús para efectuar tareas de preparación de cara a la retirada del vehículo del río.
Así, los expertos han cortado árboles y han retirado unas partes de la carrocería del autobús para aligerar su peso y, también, eludir que el agua se concentre dentro del habitáculo.
El incidente sucedió sobre las 21,20 horas de este sábado, Nochebuena, en el momento en que un autobús de la compañía Monbus, de la línea regular entre Lugo y Vigo, se precipitó al río a la altura del quilómetro 67,5 de la N-541, en la parroquia de Pedre, en un puente a unos 35 metros de altura.
Dos de los muertos fueron salvados exactamente la misma noche del hecho, con un fuerte temporal y mediante una 'línea de vida', ya que era realmente difícil y arriesgado llegar al autobús. Otras 4 víctimas fueron localizadas a lo largo de la día del domingo y la séptima fallecida, el primer día de la semana.
Poco tras el incidente, los servicios de urgencia salvaron con vida al conductor del autobús, que fue movido al Hospital Clínico de Santiago y ahora fué dado de alta. El hombre dio negativo en los test de alcoholemia y de drogas. También fue salvada con vida una mujer, que fue evacuada al Hospital Montecelo de Pontevedra.
Fue un conductor que pasó por la región poco tras el siniestro el que alertó primeramente al 112, al notar la barandilla del puente rota. Poco después, urgencias recibía asimismo la llamada de alarma de la pasajera superviviente desde en el autobús, poniendo en marcha los medios de salve.