Las altas temperaturas continúan dominando el clima en Galicia, especialmente en el interior, donde se han registrando cifras preocupantes. Este fenómeno meteorológico ha llevado a la Xunta de Galicia a elevar la alerta a nivel naranja en 74 municipios, incluyendo áreas de Ourense y Pontevedra, en un esfuerzo por mitigar los efectos en la salud pública.

Como resultado de esta medida, la práctica de actividades deportivas federadas queda suspendida durante todo el día en las localidades afectadas, aunque esta cifra representa una disminución con respecto a los 90 municipios del día anterior. Sin embargo, las zonas interiores de A Coruña han sido clasificadas en nivel amarillo, sugiriendo que la actividad en esas áreas también debe ser vigilada con cautela.

Según informes de Meteogalicia, el aire cálido sigue presente en la región, disparando nuevamente las temperaturas en el interior. A diferencia de ello, las costas disfrutan de un ligero alivio gracias a la llegada de niebla que contribuye a suavizar el calor.

Frente a esta situación, la Xunta ha tomado la decisión de prohibir la actividad deportiva federada en las cinco zonas identificadas con alerta naranja. Sin embargo, las actividades acuáticas están permitidas, aunque se recomienda evitarlas durante las horas más calurosas del día, es decir, entre las 12 y las 17 horas.

En la provincia de Ourense, los municipios afectados por estas restricciones incluyen Amoeiro, Avión, Beariz, entre otros. La lista completa refleja la amplitud del impacto de esta ola de calor en diversas comunidades locales.

Por otro lado, el Miño de Ourense también ha sido declarado en riesgo, englobando localidades como A Arnoia, Barbadás y Ourense, mientras que la montaña de Ourense abarca un amplio número de ayuntamientos como O Bolo y Castro Caldelas.

La situación es similar en el interior de Pontevedra, donde se encuentran municipios como Agolada y Lalín, que también deben estar atentos a los efectos del calor intenso.

Conscientes de los riesgos, la Consellería de Sanidade ha emitido recomendaciones para la población. Se aconseja incrementar el consumo de líquidos, preferiblemente agua y zumos fríos, y evitar alcohol y bebidas azucaradas. Asimismo, se sugiere una dieta más ligera rica en frutas y verduras para ayudar a sobrellevar las altas temperaturas.

En cuanto a la vestimenta, se recomienda optar por ropa ligera y de colores claros, así como mantener espacios ventilados. Asegurarse de utilizar las habitaciones más frescas de la vivienda y tener cuidado al dejar a niños o ancianos en vehículos estacionados es fundamental para prevenir incidentes relacionados con el calor.

En caso de experimentar síntomas de agotamiento o golpes de calor, es vital solicitar atención médica de forma inmediata llamando al 061.

Desde un punto de vista meteorológico, la zona del Miño de Ourense ha sido declarada en aviso naranja debido al riesgo de alcanzar temperaturas de hasta 39º C. Las proyecciones indican que las máximas en diferentes regiones de Galicia podrían rondar los 36º C, alcanzando incluso los 39º C en puntos específicos como Verín y en zonas del sur de Lugo.

Por último, Meteogalicia ha extendido las alertas amarillas a otras regiones de Galicia, donde se espera que las temperaturas superen los 34º C. La situación meteorológica requiere atención y precaución por parte de todos los ciudadanos para garantizar su seguridad y bienestar.