En la mañana del 18 de julio, un grave accidente de tráfico conmocionó a Aranga, en la provincia de A Coruña, cuando un coche y una furgoneta chocaron en la autovía A-6, en dirección a Lugo. Como resultado del siniestro, cinco personas tuvieron que ser evacuadas al hospital debido a las lesiones sufridas.

El incidente ocurrió minutos antes de las 8:30 horas y fue detectado gracias al sistema de alerta automática 'E-Call', que se encuentra instalado en la furgoneta involucrada. Testigos en el lugar aseguraron que el vehículo particular, donde viajaban cuatro personas, había volcado, lo que generó preocupación sobre la posibilidad de que alguien estuviera atrapado en su interior.

Los primeros informes apuntan a que el accidente tuvo lugar en el kilómetro 542 de la A-6, en un entorno donde la visibilidad era reducida debido a la niebla densa que cubría la carretera en ese momento. La situación se complicó al confirmarse que el coche había quedado volcado sobre su lado izquierdo, mientras que la furgoneta se había deslizado hacia el lado derecho, cayendo por un terraplén antes de terminar también con las ruedas hacia arriba.

Ante la gravedad de la situación, el servicio de emergencias 112 activó rápidamente a varios equipos de respuesta, incluyendo Urgencias Sanitarias-061, los bomberos de Betanzos, el Grupo de Emergencias Supramunicipal (GES) de Curtis, la Guardia Civil de Tráfico y los servicios de mantenimiento de la autovía A-6.

Al llegar al lugar del accidente, los bomberos constataron que cinco personas necesitaban atención médica urgente. Aunque uno de los heridos se encontraba aún en el interior del coche, no fue necesario llevar a cabo una operación de excarcelación. Finalmente, todos los involucrados en el accidente fueron trasladados al Complexo Hospitalario Universitario da Coruña (Chuac) para recibir tratamiento adecuado.