La asociación Morir Dignamente ha alertado sobre el “incumplimiento” de algunas disposiciones y ha urgido a la formación e información en relación a la Ley de Regulación de la Eutanasia, que entró en vigor en Galicia en 2021. Según datos proporcionados por la Consellería de Sanidade, hasta junio de este año se han formalizado un total de 58 solicitudes de eutanasia en la comunidad, de las cuales 21 han contado con informe favorable.
La ley reconoce el derecho de toda persona que cumpla los requisitos establecidos a solicitar y recibir la ayuda necesaria para morir de forma digna, estableciendo el procedimiento a seguir y las garantías a observar. Las solicitudes más numerosas provienen de personas de entre 50 a 59 años y de 70 a 79 años, siendo realizadas en su mayoría por hombres (58,6%) y motivadas principalmente por enfermedades neurológicas (50%) y oncológicas (31%).
Sin embargo, la aplicación de esta ley en Galicia ha tenido dificultades debido a la lentitud en la promulgación de las disposiciones legales necesarias para la constitución de la comisión de garantía y evaluación. Aunque estos obstáculos se han ido resolviendo, existen preocupaciones sobre el incumplimiento de disposiciones, como la falta de realización de informes anuales por parte del Sergas y la poca promoción del registro del testamento vital.
El presidente de la asociación Morir Dignamente en Galicia, Miguel Anxo García, ha destacado la importancia de la transparencia y la participación ciudadana en la implantación y consolidación de este nuevo derecho. Además, ha demandado más formación para los profesionales de la salud, así como información y difusión de este derecho entre la ciudadanía. La asociación ha llevado a cabo charlas y coloquios para informar a más de 1.200 personas sobre este tema.