La primera asamblea de cooperación bilateral se festejó en 1988 y se repitieron hasta 1999 y las reanudó el bipartito en 2006
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 1 Mar.
Los gobiernos de Galicia y Asturias han comunicado una exclusiva cima bilateral de las comunidades 'hermanas' que va a tener rincón el 17 de marzo en la Rectoral de Taramundi y donde los presidentes Alfonso Rueda y Adrián Barbón, respectivamente, prevén investigar el reto demográfico.
No es la primera oportunidad que los dos gobernantes autonómicos coinciden desde el instante en que Alfonso Rueda se realizó con las bridas del gobierno autonómico en la primavera de 2022 en substitución de Alberto Núñez Feijóo, que salió a Madrid para dirigir el PP nacional. En este tiempo, Rueda (PPdeG) y Barbón (PSOE) ahora habían coincidido en fijar la despoblación como entre los temas y desafíos conjuntos, compartidos con otras comunidades del nordoeste peninsular.
Otro de los puntos importantes es la financiación autonómica. En un recibimiento mucho más informal entre los dos gobernantes en el mes de octubre de 2022, Rueda y Barbón coincidieron en las adversidades de emprender esta reforma en un instante preelectoral, si bien el presidente gallego apremiaba el enfrentamiento más allá de comprender la contrariedad de un consenso en el tiempo político de hoy. De hecho, esta cuestión no pertenece a los temas que se van a abordar en esta cima al mucho más prominente nivel entre la Comunidad gallega y el Principado, según la nota divulgada por los dos gobiernos a los medios.
No obstante, con todavía Alberto Núñez Feijóo como presidente de la Xunta, Compostela ahora fue ámbito de pactos multilaterales sobre criterios conjuntos a proteger en la financiación autonómica. Quedaron recogidos en el pacto 'Foro de discusión de Santiago. Camino de Consenso', que reunió en el mes de noviembre de 2021 a Galicia, Asturias, La Rioja, Cantabria, Aragón, Castilla y León, Extremadura y Castilla-La Mancha, el 60 por ciento del territorio del Estado, y que se rigen bajo la propuesta de una negociación de la financiación autonómica multilateral y que integre causantes correctores a fin de que se atienda el coste real de los servicios --como envejecimiento y dispersión--.
Según el comunicado enviado por los dos gobiernos este miércoles, en la cima de Taramundi del 17 de marzo se van a tratar la legislación y gobernanza del reto demográfico, las políticas de emigración y también inmigración y retorno, los servicios sociales y la innovación en el ámbito rural.
En exactamente la misma publicación oficial, avanzan que Rueda y Barbón firmarán una declaración conjunta para detallar mecanismos de cooperación en la pelea contra la despoblación rural, un tema "vital" para el futuro de las dos comunidades, que distribuyen "retos afines".
Aunque a lo largo de la etapa de Feijóo se sostuvieron las relaciones entre los dos gobiernos y hubo asambleas multilaterales y distintas, como el de 2018 entre el gobernante gallego y Javier Fernández, las últimas cimas a dos bandas de cooperación hay que procurarlas en la primera década de los años 2000.
Tras seis años de parón, en el mes de enero de 2006, el de aquella gobierno bipartito de PSdeG-BNG encabezado por Emilio Pérez Touriño y el ejecutivo dirigido por Vicente Álvarez Areces (PSOE) reanudaron la cooperación bilateral que habían dejado aparcada en 1999, asimismo en Taramundi, nuestro Areces y Manuel Fraga, que dirigió la Xunta hasta 2005.
La asamblea de enero de 2006 se tradujo en una visita de los dos presidentes en el mes de octubre de ese año nuevamente a Taramundi para revisar el estado de los pactos. En esa visita, Touriño y Areces reafirmaron que en 2009 "los vehículos circularán por la Autovía del Cantábrico", o asimismo famosa como transcantábrica (A-8), más allá de que esta obra no se completó hasta 2014 derivado de la crisis y, en especial, de los inconvenientes profesionales.
Tras la séptima cima astur-galaica, se repitieron las asambleas al mucho más prominente nivel en 2007, en un caso así en Oviedo, y en 2008, nuevamente en la ciudad más importante gallega, que se acabó con la firma de seis pactos a dos bandas. En esta última cima, Emilio Pérez Touriño y Vicente Álvarez Areces acordaron proteger "criterios recurrentes" en el enfrentamiento del nuevo modelo de financiación autonómica y no descartaron sumar a su iniciativa a otras comunidades "con inconvenientes afines", como Castilla y León o Extremadura, algo que al final fructificó en los ordenes de Feijóo.
Ya en 2008, Galicia y Asturias defendían que la financiación autonómica debía priorizar el envejecimiento de la población, la dispersión geográfica o las condiciones orográficas en frente de otros criterios, como el número de pobladores, un enfrentamiento que prosigue abierto hoy en día en frente de las comunidades con mucho más número de pobladores.
Aquella última al mucho más prominente nivel en 2008 fue calificada por el en este momento presidente y entonces secretario general del PP gallego, Alfonso Rueda, de "ámbito de autobombo" en el que se habían afirmado los "retrasos y anulaciones" de los compromisos comprados en precedentes oportunidades.
Taramundi fue ámbito de múltiples asambleas de cooperación bilateral y, en verdad, la primera en el mes de julio de 1988, en el momento en que sostuvieron este acercamiento de cooperación los presidentes Fernando González Laxe (PSOE) y Pedro Silva (PSOE). Dos años después, se repitió con Silva y Fraga (PP), centrada en la cuestión de las rutas y la gran velocidad. Xunta y Principado aseguraron en conjunto en su comunicado este jueves que la asamblea del próximo 17 de marzo "recopila el testigo" de estas asambleas citadas del pasado siglo.