La Xunta ha compartido con el Consello Galego da Convivencia los resultados de una encuesta realizada a más de 172.000 personas.
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 11 Jun.
Más de la mitad de los estudiantes de 5º y 6º de Educación Primaria en Galicia tienen un teléfono móvil propio, según un informe elaborado por la Xunta. En Educación Secundaria Obligatoria (ESO) el porcentaje se eleva al 90,6%, y en niveles postobligatorios alcanza el 92,5%.
Estos datos provienen de una encuesta extendida a todos los centros públicos gallegos, en la que han participado más de 172.000 personas entre profesores, alumnos y familias, con un total de 43 millones de datos recopilados y procesados.
El conselleiro de Educación, Ciencia, Universidades e FP, Román Rodríguez, ha resaltado la importancia de estos datos en la elaboración de planes de convivencia en cada centro educativo. Cada escuela recibe un dossier personalizado con la información correspondiente para determinar cómo abordar la convivencia en su ámbito.
Según el informe, casi el 90% de los encuestados considera que los conflictos son poco comunes y no representan un problema generalizado, y el 85,5% dice no haber recibido amenazas, intimidaciones o insultos en línea.
Sin embargo, el porcentaje de estudiantes que reportan hostilidad en línea disminuye a medida que aumenta la edad. Por ejemplo, el 95,6% de los alumnos de 5º y 6º de Primaria afirman haber experimentado algún tipo de hostilidad en línea, comparado con el 79,7% en Bachillerato.
En cuanto al uso de Internet, el 81% de los alumnos de ESO y el 90,9% de niveles postobligatorios se conectan varias veces por semana o a diario. Además, el 64,1% de los estudiantes de Primaria y el 78% de ESO pasan entre una y más de cinco horas al día en línea.
La mayoría de los estudiantes utilizan redes sociales, con Tiktok e Instagram siendo las más populares entre los estudiantes de ESO, y Youtube, Pinterest y Twitter entre los de niveles superiores. En cuanto a mensajería instantánea, WhatsApp, Zoom y Meet son las más utilizadas.
En relación al control parental, el 83,3% de las familias limita el uso de tecnologías, y el 68,9% no permite conexiones durante horas de estudio. En cuanto a conductas de riesgo, solo un pequeño porcentaje de estudiantes participa en apuestas en línea, mientras que una mayor proporción admite haber accedido a contenido pornográfico.
Por último, la encuesta incluyó preguntas sobre roles de género, con la mayoría de los encuestados (tanto estudiantes como familias) apoyando la igualdad de tareas del hogar entre hombres y mujeres.
En resumen, los datos recopilados en esta encuesta ofrecen una visión detallada de los hábitos sociales y el uso de la tecnología entre los estudiantes gallegos, y serán fundamentales para la planificación de estrategias educativas futuras.
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