Informe pide eliminar restricciones para enseñar ciencias en gallego

El Consejo de Europa ha emitido un informe que destaca la situación de las lenguas minoritarias en España, con recomendaciones específicas para proteger y promover cada uno de estos idiomas. En el caso del gallego, se destaca la necesidad de eliminar las limitaciones existentes para enseñar ciencias en este idioma.

En Galicia, se ha señalado la importancia de impulsar el gallego en la educación y de superar obstáculos como los establecidos en el decreto de plurilingüismo aprobado durante el mandato de Alberto Núñez Feijóo en 2010.

Este decreto no solo estableció un equilibrio en el uso de gallego, castellano e inglés en las aulas, sino que también restringió la enseñanza de asignaturas como Matemáticas, Tecnologías, Física y Química exclusivamente en castellano, una limitación que el Consejo de Europa señala como problemática.

Además, se ha subrayado que establecer un porcentaje mínimo de enseñanza en castellano en cada centro educativo, como se hizo en Cataluña con el 25% de las horas lectivas en castellano, va en contra de los compromisos asumidos por España en la Carta Europea de Lenguas Regionales o Minoritarias.

Asimismo, se han formulado recomendaciones para promover el gallego en todos los niveles educativos, así como en sectores como la enseñanza técnica, la distancia y la atención sanitaria, entre otros.

Tras la publicación de este informe, A Mesa pola Normalización Lingüística ha criticado la actitud de desprecio mostrada hacia el gallego por parte del Estado y la Xunta, considerando que el incumplimiento de la Carta de 2001 por parte de la administración autonómica pone en entredicho la oficialidad de este idioma.

El informe del Consejo de Europa reconoce los avances en la protección y promoción de las lenguas minoritarias en España, pero también identifica desafíos como la promoción de estas lenguas en ámbitos de competencia estatal y autonómica, así como en la justicia y los intercambios transfronterizos.

En otras regiones como Cataluña y País Vasco, el informe destaca la situación del catalán y el euskera respectivamente, señalando áreas de mejora en ámbitos como la educación, los servicios sociales y la administración pública.