El inspector jefe piensa que el acusado asimismo participó en el atraco al Cash Miño en 1992 y que se le podría imputar un tercer asesinato a un vecino de Monforte

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 9 Feb.

Un inspector jefe de la Unidad Central de Delincuencia Especializada de la Comisaría General de Policía Judicial de Madrid, alejado a solicitud de la Fiscalía en 2013 a Lugo para investigar el delito del Cash Record, ocurrido el 30 de abril de 1994, ha señalado este jueves en su declaración que "no había pruebas determinantes", pero "sí rastros suficientes para declarar al acusado creador del doble asesinato".

En la cuarta día del juicio en la Audiencia Provincial de Lugo, este inspector ha apuntado que el acusado, M.J.V.C., "cumple todos y cada uno de los requisitos". Así, ha incidido en que la persona que mató a la cajera y el reponedor "entró con la intención de no dejar presentes, en tanto que sabría que lo iban a admitir".

En esta línea, indicó que "no fue un toxicómano que se puso inquieto y disparó", sino era un individuo famosa por los trabajadores del local y que "se encontraba familiarizada y no de manera superficial con las armas".

Además, este inspector jefe explicó que la investigación seguida por los agentes de Lugo coincidía al "cien%" con las conclusiones a las que llegó su brigada.

Este agente ha citado la presunta relación del acusado con el atraco del Cash Miño, ocurrido en Lugo un par de años antes, puesto que "es exactamente el mismo modus operandi" y en ese atraco -- cometido por 2 personas -- uno se refirió al otro con el nombre del acusado.

Asimismo, ha señalado que estas indagaciones asimismo podrían imputarle al acusado un tercer asesinato, la de un hombre natural de Monforte de Lemos que apareció fallecidos en una finca en las inmediaciones de Lugo y que según el agente, podría ser "por cuestiones de sustancia".

De este modo ha proclamado que el juzgado rechazó reabrir la causa, si bien ha puntualizado que "hay rastros que señalarían que el acusado lo mató y se quedó con el dinero".