La Xunta deberá indemnizar con 1.793 euros a un apicultor por los daños del oso pardo en sus colmenas.

En Santiago de Compostela, la sección tercera de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ha fallado a favor de un apicultor que fue denegado por la Xunta de Galicia en su solicitud de ayuda para compensar los daños causados por el oso pardo en sus colmenas.

El tribunal gallego ha ordenado a la Consellería de Medio Ambiente a pagar 1.793 euros al recurrente, argumentando que la negativa de la subvención fue injusta al no tener el apicultor numeradas e identificadas individualmente sus colmenas.

Los jueces basaron su decisión en la doctrina de los actos propios y la buena fe en la relación entre la Administración y los administrados, así como en la finalidad de la norma que buscaba compensar los daños del oso pardo.

En su resolución, los magistrados destacaron que la Administración no informó al apicultor sobre la necesidad de identificación individual de las colmenas, lo que contribuyó a la creencia del solicitante de que cumplía con todos los requisitos necesarios.

Además, el tribunal señaló que la exigencia de identificación individual de las colmenas no era esencial en este caso, dado que no había dudas sobre los daños causados por el oso pardo.

La sentencia no es definitiva, ya que se puede presentar un recurso de casación en su contra.