La provincia de Galicia se encuentra en alerta por la persistencia de chubascos tormentosos, lo que ha afectado a varias áreas como Ourense, Lugo y Pontevedra. Lugo ha sido una de las zonas más afectadas, donde el Rato se ha desbordado provocando inundaciones en las calles, bajos y en el Hospital Universitario Lucus Augusti (HULA). Otras zonas como Bóveda también han registrado la presencia de lluvias fuertes, con granizo acumulado de más de un metro de altura en algunas zonas.
El teniente de alcaldesa de Cohesión Territorial, Miguel Fernández, ha destacado que a causa de la gran cantidad de agua caída, la red de saneamiento no pudo absorberla en zonas puntuales de la ciudad. En consecuencia, el agua se filtró en bajos de edificios y afectó a ciertas áreas del HULA. Sin embargo, las labores de limpieza y secado estuvieron en marcha desde la mañana del día siguiente y el área sanitaria aseguró que no hubo afectaciones asistenciales.
Las autoridades locales están en prealerta por si ocurren lluvias torrenciales, pero esperan que situaciones como esta no se vuelvan a producir. Se activó un operativo de nueve operarios, dos capataces y maquinaria para recuperar las zonas afectadas, lo que permite al gobierno local asegurar que se actuó de manera rápida junto con los bomberos y la Policía local.
Bóveda también ha sido una de las localidades afectadas, donde la acumulación de granizo generó molestias a los vecinos. Otros municipios como Castro de Rei también han experimentado daños en cultivos. Por su parte, MeteoGalicia ha mantenido la alerta naranja por fuertes chubascos tormentosos que podrían persistir hasta las 21 horas del día de hoy en varias zonas de la comunidad autonoma.