SANTIAGO DE COMPOSTELA, 1 de noviembre.

En un hecho que resalta la importancia de la seguridad marítima, el Centro de Salvamento Marítimo (CCS) de Fisterra, bajo la supervisión de la Capitanía Marítima de A Coruña, llevó a cabo una efectiva operación de rescate el pasado sábado tras el volcamiento de una embarcación de recreo cerca de Lobeira Grande, entre los faros de Lobeira y Cee, en la ría de Corcubión.

Este incidente ocurrió como resultado de un golpe de mar violento que arrojó a los tres ocupantes al agua, además de causar la inundación de la embarcación, lo que podría haber tenido graves consecuencias.

La alarma fue activada a las 09:51 horas cuando los tripulantes, en una situación desesperante, lograron contactar al servicio de emergencias 112 a través de un teléfono móvil, iniciando así la respuesta rápida que se requería.

En respuesta a esta emergencia, el CCS Fisterra no tardó en activar su protocolo de rescate, enviando el helicóptero Helimer 402 y la embarcación auxiliar del buque María Pita para ayudar en la búsqueda. Asimismo, se lanzó un Mayday para advertir a otros buques en la zona sobre la situación crítica y pedir su asistencia.

A las 11:05 horas, la embarcación auxiliar del María Pita logró rescatar a los tres náufragos, de los cuales dos mostraban signos evidentes de hipotermia. Este rescate oportuno fue un claro ejemplo de la preparación y eficiencia del equipo de salvamento.

Siguiendo las indicaciones del CCS Fisterra, los rescatados fueron trasladados al puerto de Cee para recibir atención médica. A su llegada a las 11:21 horas, ya estaban esperando los paramédicos de una ambulancia del 061 para brindarles el cuidado necesario. La embarcación hundida fue señalizada para prevenir futuros incidentes.

Tras completar el rescate, la embarcación auxiliar del María Pita regresó al sitio del accidente para proceder con el remolque del barco siniestrado, asegurando así que la zona se mantuviera libre de peligros para otros navegantes.