Crónica Galicia.

Crónica Galicia.

Condenado a un año y siete meses de cárcel por vaciar un extintor en los juzgados de Vigo, obligando a su desalojo.

Condenado a un año y siete meses de cárcel por vaciar un extintor en los juzgados de Vigo, obligando a su desalojo.

VIGO, 6 de noviembre de 2023.

En un preocupante incidente ocurrido en octubre, un hombre ha sido condenado a un año y siete meses de prisión tras vaciar un extintor en un juzgado de Vigo, lo que llevó al desalojo de toda la Ciudad de la Justicia. Este acto ha sido catalogado como un delito de desórdenes públicos y un delito leve de lesiones, ya que el individuo agredió a la persona que había presentado una denuncia en su contra.

La audiencia de conformidad se llevó a cabo el miércoles en el Juzgado de lo Penal número 1 de la ciudad gallega, donde el acusado reconoció su culpabilidad y aceptó la condena impuesta, que incluye una multa que supera los 1.200 euros—específicamente 1.125 euros por el desorden público y 90 euros por el delito de lesiones.

Adicionalmente, se ha determinado que el agresor debe indemnizar a su víctima con la suma de 50 euros. En un acuerdo alcanzado en los tribunales, se establece que evitará ingresar en prisión siempre que no incurra en actos delictivos en los próximos años.

Los hechos que llevaron a esta condena ocurrieron el 5 de octubre de 2023, cuando el acusado debía comparecer ante el juzgado por un delito menor, al mismo tiempo que se encontraba presente la persona que lo había denunciado. Después de que la vista fuera suspendida, el hombre en cuestión se apoderó de un extintor, desactivó su precinto y roció a su denunciante en la cara, cubriendo no solo al agredido, sino también a toda la sala y el mobiliario con un polvo blanco.

Este acto irresponsable activó la alarma de incendios en la Ciudad de la Justicia, lo que causó la suspensión o retraso de múltiples vistas en salas de instrucción, de lo Social y en dos juzgados penales. Tal situación plantea serias preguntas sobre la seguridad en nuestros sistema judicial.

Es relevante señalar que el acusado padece un trastorno orgánico de personalidad, caracterizado por rasgos obsesivos y paranoides, además de un síndrome frontal. Ese día, experimentó un episodio de alteración de conducta que pudo haber afectado gravemente su capacidad para tomar decisiones. Este contexto sugiere la complejidad que rodea el caso y la necesidad de abordar tanto la responsabilidad como las implicaciones de salud mental en situaciones de este tipo.