El próximo miércoles se llevará a cabo el juicio contra un funcionario de Hacienda de la delegación de Santiago de Compostela, acusado de cobrar créditos y devoluciones de la renta ajenas empleando una identidad falsa. Según la Fiscalía, el empleado público creó esta identidad aprovechándose de su posición como técnico informático y accediendo a expedientes tributarios que se tramitaban en la delegación. Las acciones del acusado han llevado a la Fiscalía a solicitar una condena de 12 años y once meses de prisión, además de una multa de 160.000 euros y la inhabilitación para cargo público por 29 años.

El acusado habría creado una identidad falsa con la que abrió dos cuentas bancarias y tres líneas de teléfono, a través de las cuales cobró cinco devoluciones de declaraciones de la renta de empresas diferentes, por un total de 11.900 euros, y solicitó un crédito de 31.000 euros que fue abonado en la cuenta bancaria que él mismo creó.

Además, la Fiscalía sostiene que el acusado habría pedido supuestamente otros dos créditos a nombre de un compañero por 35.000 euros, que también fueron a parar a la cuenta bancaria creada por el procesado. En total, se le acusa de cometer tres delitos: uno continuado de estafa, en concurso medial con uno de falsificación de documento mercantil y público también continuado, otro de blanqueo de capitales y cinco delitos de acceso no autorizado al sistema de información por parte de un funcionario público.