La Guardia Civil ha confirmado que el cadáver localizado en el río Ulla el pasado lunes corresponde a Óscar García Lema, un vecino de Teo de 62 años que había desaparecido el 29 de marzo. El cuerpo fue encontrado por una mujer que realizaba senderismo en la zona del puente de Gundián, en Vedra (A Coruña).
Desde el primer momento se barajó la posibilidad de que el cuerpo encontrado fuese el de García Lema, sin embargo, se necesitaba la confirmación de los resultados de ADN y la autopsia. La Guardia Civil ha ratificado la identificación del cuerpo y ha trasladado que las investigaciones llevadas a cabo "no determinan la involucración de terceras personas" en su muerte.
La desaparición de García Lema movilizó a la Guardia Civil y a numerosos voluntarios civiles, que realizaron numerosas batidas en la zona en busca del vecino. Aunque se puso el foco en otras desapariciones sin resolver, la Guardia Civil trabajó desde el principio con la posibilidad de que el cuerpo fuese el de García Lema.
A finales de la semana pasada se suspendieron las batidas con voluntarios, pero la Guardia Civil mantuvo abierta la investigación y no descartó pedir la colaboración ciudadana de nuevo. El cuerpo de García Lema será entregado a su familia con la mayor brevedad posible.