En Santiago de Compostela, la preocupación por los incendios forestales en Galicia se intensifica. El más reciente foco se ha originado en Avión, en la provincia de Ourense, a las 17:09 del domingo y consume aproximadamente 70 hectáreas en la parroquia de Nieva. En total, hay tres incendios activos en la región, todos concentrados en Ourense, que se encuentra en estado de alerta máxima desde hace casi dos semanas.

La Consellería do Medio Rural ha actualizado la situación, indicando que se consideran los incendios que afectan más de 20 hectáreas. Además del que se desató en Avión, se ha confirmado la actividad de otros dos incendios en Ourense, específicamente en Chandrexa de Queixa y Vilariño de Conso, que han sido reportados como un solo incendio dividido en tres focos. Este fuego ha devastado cerca de 19.000 hectáreas, afectando también a los municipios de Manzaneda, Montederramo, A Pobra de Trives, O Bolo y Laza.

En la actualidad, solo uno de los focos en Vilariño, que se ubica en la parroquia de Mormentelos, sigue ardiendo, mientras que los otros dos en Requeixo y Parafita han sido estabilizados. Por otro lado, el incendio en Carballeda de Valdeorras, originado en Porto, Zamora, el 14 de agosto, ha cruzado a Ourense, extendiéndose a 4.400 hectáreas en la región.

A pesar de los desafíos, hay cinco incendios estabilizados en Ourense, de los cuales tres se encontraban en esta condición desde el fin de semana. Estos incluyen el de Larouco, en la parroquia de Seadur, que ha quemado 30.000 hectáreas, y los fuegos de Oímbra y Xinzo de Limia, que afectan 17.000 hectáreas, junto al de A Mezquita en A Esculqueira, que ha consumido 10.000 hectáreas. También están estabilizados los fuegos de Carballeda de Avia y Beade, y el de Vilardevós en Vilar de Cervos, que han arrasado 4.900 y 900 hectáreas, respectivamente.

Todos enfrentamos el impacto de la situación actual, pues otros cinco incendios se consideran controlados. Entre ellos se encuentran los fuegos en Maceda y Vilardevós, así como en Montederramo, Riós y Carballedo, cuyos daños son menores pero igualmente preocupantes.

En la provincia de Lugo, el fuego en Carballedo ha sido controlado desde el domingo, aunque se había declarado estado de emergencia dos por su cercanía a la localidad de Oleiros. Asimismo, en Pontevedra, el fuego en Vilaboa se estabilizó el sábado, después de que se activara el nivel 2 de emergencia por riesgo a las viviendas cercanas.