En un terrible suceso que tuvo lugar en enero de 2021, un hombre fue asesinado en un hostal de Mondariz, en la provincia de Pontevedra. El acusado de este homicidio, Miguel Ángel G.M., ha admitido su responsabilidad en el primer día del juicio con jurado que se está llevando a cabo en la Audiencia Provincial de Pontevedra.
El procesado, que ha estado recluido en prisión desde su arresto, solo ha hablado para confirmar ante la magistrada que los hechos de los que se le acusa son ciertos. Además, ha decidido ejercer su derecho a no declarar, incluso frente a las preguntas de su abogado.
Tanto la Fiscalía como la acusación particular, que representa a la familia de la víctima, solicitan una condena de 17 años de prisión por el delito de asesinato. También piden que se le prohíba al acusado comunicarse o acercarse a los familiares de la víctima durante 23 años y que les indemnice según lo determinado por vía civil.
En la consideración de estas peticiones, se ha tenido en cuenta la circunstancia atenuante de alteración psíquica, ya que Miguel Ángel ha sido diagnosticado con psicosis esquizofrénica paranoide y no estaba siguiendo el tratamiento prescrito en el momento de cometer el crimen. Sin embargo, el informe forense señala que esta condición pudo haber afectado parcialmente su capacidad de voluntad, pero no sus facultades intelectuales.
En un principio, la defensa del acusado solicitaba su absolución, pero tras su confesión, el abogado deberá cambiar su estrategia y buscar la aplicación del mayor número posible de atenuantes para intentar reducir la pena impuesta.
El juicio continuará este martes, aunque ambas partes han renunciado a muchas declaraciones y han solicitado que solo se realice la prueba estrictamente necesaria para probar los hechos y las circunstancias modificativas de la responsabilidad criminal. Por lo tanto, es probable que en el segundo día de juicio se den por finalizadas todas las declaraciones.
De acuerdo con el escrito de acusación de la Fiscalía, los hechos tuvieron lugar en enero de 2021. En ese momento, el acusado y la víctima eran los únicos huéspedes del hostal en Mondariz y mantenían una mala relación debido a que, aparentemente, el acusado ponía música a altas horas de la madrugada, golpeaba la pared y pedía tabaco a menudo.
La víctima, que había vivido en ese establecimiento durante 17 años, expresó sus quejas a la propietaria del negocio sobre el comportamiento del acusado. En respuesta a esto, el acusado dijo al otro huésped que lo había arruinado y que lo haría pagar las consecuencias.
El 9 de enero de 2021, el acusado adquirió un cuchillo de cocina en un bazar de Ponteareas. Según el informe forense, las características del cuchillo son compatibles con las múltiples heridas incisas que presentaba el cuerpo de la víctima, estimadas en entre 80 y 90.
La Fiscalía sostiene que en algún momento entre la tarde del 17 de enero, cuando se vio a la víctima con vida por última vez, y la noche del 22 de enero, cuando se encontró su cuerpo, el acusado lo apuñaló hasta causarle la muerte y trasladó su cadáver a un semisótano adjunto al hostal, donde lo abandonó.