SANTIAGO DE COMPOSTELA, 5 de junio.

En un reciente giro de los acontecimientos, el Bloque Nacionalista Galego (BNG) ha solicitado al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, que aclare las circunstancias que rodean su relación con el conselleiro do Mar, Alfonso Villares, quien renunció a su cargo el pasado miércoles tras ser informado sobre una investigación por un presunto delito de agresión sexual. La formación política acusa a Rueda de haber mantenido en la sombra esta situación durante meses, lo que pone en entredicho su liderazgo.

En una rueda de prensa, la diputada nacionalista expresó su indignación y cuestionó cómo es posible que el mandatario gallego tuviera conocimiento de tales acusaciones sin haber tomado medidas previamente. Además, reafirmó la postura del BNG en contra de cualquier tipo de violencia de género, resaltando que los delitos sexuales se enmarcan en este tipo de violencia que se encuentra recogida en la legislación vigente.

La crítica de Noa Presas se centró en la manera en que algunos miembros del Partido Popular de Galicia (PPdeG) han trivializado la investigación sobre la agresión sexual por parte de un integrante del gobierno regional, apuntando que esto sucede en un contexto alarmante, en el que la sociedad gallega ha sido testigo de actos de violencia extrema, como el reciente feminicidio ocurrido en la comunidad.

Presas calificó la violencia machista como una crisis de relevancia fundamental que debe abordarse con seriedad y sin atenuantes. También expresó su desacuerdo con la minimización de la gravedad del asunto en favor de argumentos personales, subrayando que la situación debe ser tratada con la urgencia que amerita.

En un tono contundente, la dirigente nacionalista condenó la narrativa que busca transformar al acusado en víctima, considerándolo un agravio a las verdaderas víctimas. En este sentido, rechazó enfáticamente que la salida de Villares del gobierno fuese tratada como un acto heroico y encontró alarmante que este hecho fuese celebrado por sus compañeros de gabinete, incluidas figuras de la consellería de Igualdad, como Fabiola García.

Presas también advirtió del peligro que representa el mensaje que se envía a las víctimas de violencia, así como a aquellas que están considerando presentar denuncias. Subrayó que no se debe utilizar la influencia del gobierno para suavizar la imagen del acusado o para perpetuar actitudes machistas, lo que consideró una falta de respeto hacia quienes sufren estas agresiones.

La diputada concluyó enfatizando la importancia de enviar un mensaje claro a las mujeres de que sus denuncias serán tomadas en serio. Anunció que su partido ha presentado una moción en el Parlamento de Galicia para exigir responsabilidades al presidente de la Xunta y para investigar el origen de la filtración que algunos medios relacionan con el círculo cercano del imputado, identificando a la presentadora Paloma Lago como la denunciante.

Por último, hizo hincapié en que si la información provenía del entorno de Villares, esto representaría un mensaje devastador para cualquier mujer que considere denunciar, al sugerir que enfrentaría un escrutinio público punitivo en lugar de apoyo y comprensión.