En Pontevedra, la controversia sobre la desaparición de dos fardos de cocaína provenientes del buque MV Karar ha vuelto a escena este martes, durante la reanudación del juicio en la Audiencia de Pontevedra por el alijo de 3,8 toneladas de droga.
Después de dos meses de receso, las declaraciones se retomaron esta semana en la sede judicial de Pontevedra, ya que la sala de la Ciudad de la Justicia de Vigo, donde se celebraban las sesiones, está ocupada en estos días.
En esta etapa del juicio, solo 14 de los 28 acusados se han sentado en el banquillo, ya que el tribunal eximió de comparecer a los tripulantes extranjeros del Karar, cinco de Bangladesh y nueve de Nepal.
Asistieron a la audiencia el presunto líder del grupo, Juan Carlos Santórum, varios de sus allegados, un constructor de barcos, un ciudadano colombiano, el único tripulante gallego del Karar, un exfuncionario de Aduanas y su esposa.
En la jornada de hoy, se continuó con la declaración de los testigos policiales, incluido un agente de Udyco central que lideró el abordaje del Karar y participó en la detención del trabajador de Vigilancia Aduanera, su esposa y el ciudadano colombiano.
El agente testificó que contó los fardos de cocaína tras el abordaje del Karar y afirmó que nadie de la tripulación pudo manipularlos o hacer que desaparecieran dos de ellos.
Las supuestas irregularidades en el caso incluyen la discrepancia en el número de fardos de cocaína a bordo del Karar, así como la desaparición de un documento con coordenadas relacionadas con el alijo de drogas.
En la jornada de hoy, se solicitó acceder a un teléfono satélite intervenido a uno de los acusados, pero el tribunal rechazó la petición al no contar con la prueba en ese momento.
Además, el agente policial informó sobre la detención de tres personas relacionadas con el alijo en Leganés, donde se encontraron 368.000 euros y varios objetos ilícitos en su vivienda.
El juicio aún tiene un largo camino por recorrer, con la participación de alrededor de un centenar de testigos y peritos, incluido un exjefe investigado por presuntas conexiones con el narcotráfico.
La acusación pesa sobre los 28 procesados por delitos de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal, con cargos adicionales para el ciudadano colombiano y el exfuncionario de Aduanas y su esposa.
La Fiscalía solicita una condena de 18 años y medio de prisión para Santórum y multas millonarias para todos los involucrados, mientras que los tripulantes admitieron conocer el objetivo de la travesía y su carga de cocaína.
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