El ex monarca, Juan Carlos I, ha vuelto a elegir el municipio pontevedrés para su segunda visita a España desde su marcha a Abu Dabi.

El domingo, Juan Carlos I abandonaba la casa de su amigo y regatista, Pedro Campos, después de una estancia de cinco días. Durante su visita, el ex monarca ha disfrutado de muy pocas horas de vela a bordo del Bribón debido a las condiciones meteorológicas adversas, lo que también le ha impedido participar en la Copa del Rey de Vela.

Las salidas del jueves y viernes sirvieron como 'entrenamiento' tanto para el emérito como para su tripulación. El sábado estaba previsto que Don Juan Carlos participase como patrón en las regatas de la Copa del Rey, pero tampoco ocurrió. Las malas condiciones meteorológicas y el mal tiempo incluso obligaron a suspender la prueba de la tarde del sábado

El ex monarca ha mantenido una baja actividad en Galicia durante su estancia, limitándose a navegar algunas horas por la ría de Pontevedra, y a alojarse en la vivienda de su amigo. La moderación en la publicidad de la visita ha tenido un efecto en las habituales manifestaciones y declaraciones de repulsa por su presencia en Galicia, que no han sido multitudinarias.

Este viernes, el Partido Comunista de Galiza y de España, Esquerda Unida, Plataforma 3R y Asamblea Republicana han convocado una concentración bajo el lema 'nin reis nin corruptos' en el mirador Juan Carlos I, al lado del náutico de Sanxenxo.

Tras una estancia de cinco días, el ex monarca abandonaba este domingo la vivienda de Pedro Campos en dirección al aeropuerto vigués de Peinador, desde donde ha volado a Vitoria.

Esta es la segunda visita que Don Juan Carlos realiza a España desde que en 2020 abandonase España para residir en Abu Dabi después de conocerse que podría haber protagonizado actividades fiscales 'ilícitas'.

La Fiscalía general abrió incluso tres diligencias: por el presunto cobro de comisiones por la concesión del AVE a La Meca a empresas españolas, por el uso por parte de Don Juan Carlos y otros familiares de tarjetas 'black', y por la existencia de una cuenta con 10 millones de euros a su nombre en un paraíso fiscal. Tras dos regularizaciones que sumaban más de cinco millones de euros, la Fiscalía archivaba el caso.