VIGO, 14 de junio. Hoy, la sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, situada en Vigo, se prepara para juzgar a dos individuos acusados de llevar a cabo un atraco en una sucursal de Abanca en abril de 2023. En este caso, los delincuentes enfrentan distintos tiempos de prisión: uno podría recibir hasta 5 años, mientras que el otro se enfrenta a una pena de 4 años y 8 meses. Los nombres de los procesados son M.A.F.O., conocido como 'Migallas', y J.J.T.

El juicio original, programado para finales de abril de 2025, tuvo que ser suspendido debido a la falta de uno de los abogados defensores. Esta situación llevó a que la nueva fecha se fijara para hoy, 18 de junio.

Los hechos narran que el 14 de abril de 2023, alrededor de las 14:00 horas, los acusados ingresaron en la sede de Abanca ubicada en el número 69 de la Avenida de Martínez Garrido. Durante el atraco, uno de ellos se presentó con una peluca, gafas de sol y una mascarilla, mientras que el otro llevaba puesta una gorra y una braga en el cuello. Ambos estaban armados con lo que aparentaban ser pistolas.

Una vez dentro de la oficina, los atracadores intimidaron a varias personas: el director, la subdirectora, dos empleadas y un cliente. Los obligaron a dirigirse a la zona donde se encontraba la caja fuerte, exigiendo que activaran la apertura de la caja así como la máquina dispensadora de dinero del mostrador y dos cajeros automáticos.

Mientras las víctimas intentaban cumplir con sus órdenes, los delincuentes proferían amenazas de abrir fuego si se intentaba activar alguna alarma. Tras un tenso periodo de espera por los mecanismos de seguridad, lograron sustraer un total de 117.465 euros.

Además, uno de los atracadores exigió al director que le entregara las llaves de su BMW, que estaba aparcado en el exterior de la sucursal. Después de llevar a cabo el atraco, los delincuentes huyeron en el coche, que la policía logró localizar más tarde en perfecto estado.

En los días siguientes, las autoridades actuaron rápidamente y detuvieron a los presuntos ladrones, recuperando algunos de los fondos robados, en concreto más de 32.000 euros. Uno de los detenidos, además, fue encontrado en posesión de 15,5 gramos de heroína.

El Ministerio Fiscal ha calificado las acciones de los acusados como un delito de robo con intimidación, añadiendo agravantes por el uso de disfraces y, en un caso, por reincidencia, dado que uno de ellos ya había sido condenado por un robo violento anterior. La Fiscalía solicita una condena de 4 años y 8 meses para uno de ellos, mientras que el reincidente podría enfrentar 5 años tras las rejas. Además, se demanda que ambos restituyan a Abanca el dinero robado, descontando lo que ya ha sido recuperado.