En un alarmante incidente que ha sacudido la comunidad, la Guardia Civil ha intervenido para rescatar a un niño de tan solo ocho años en Ourense, luego de descubrir evidencias de maltrato físico. El menor, que había estado sufriendo en un entorno familiar aterrador, logró escapar de la trágica situación que lo mantenía cautivo en su hogar.

Este sábado, los agentes llegaron a la residencia del niño tras recibir un llamado de emergencia al 112. Según informes, el menor hizo la llamada luego de conseguir liberarse de sus ataduras, revelando que su madre lo había confinado en el baño con una bolsa sobre la cabeza, una situación que no se puede ni imaginar.

Ambos, el pequeño y su madre, están actualmente en el Complejo Hospitalario Universitario de Ourense, donde los médicos han encontrado marcas en el cuerpo del niño que sugieren lesiones por maltrato. Este descubrimiento ha llevado a las autoridades competentes a tomar medidas inmediatas para garantizar su protección.

El caso ha sido rápidamente referido a la Fiscalía de Menores y a la Xunta por la gravedad de la situación. Desde la Consellería de Política Social se ha informado que están al tanto de los acontecimientos y que los servicios de protección infantil están trabajando activamente para asegurar el bienestar del menor, un punto crucial en este tipo de situaciones.

Por otra parte, se ha confirmado que la Xunta ha tomado la custodia del niño y ha organizado su acogida en un entorno familiar distinto, mientras que la madre enfrenta cargos por violencia doméstica, lo que añade una capa de complejidad legal al caso. La comunidad mira con expectación cómo se desarrollan los acontecimientos en este trágico suceso que subraya la necesidad de atención a los casos de maltrato infantil.