Los presuntos responsables de una serie de robos en el punto limpio del polígono de Sergude, en Boqueixón, han sido detenidos por la Guardia Civil en una operación denominada Lubu. La banda familiar, compuesta por seis personas, una de ellas menor de edad, contaba con la colaboración de un trabajador municipal para sustraer la chatarra.

La Operación Lubu fue llevada a cabo por el Equipo Roca de la Guardia Civil de Santiago de Compostela, después de que se detectara un aumento considerable en el número de robos en el recinto, lo que generó una gran preocupación tanto en la empresa gestora como en las del polígono.

Las investigaciones permitieron identificar a siete personas, residentes en A Estrada pero con vínculos familiares y de origen extranjero. Estos individuos actuaban en coordinación y se desplazaban en tres furgonetas desde su localidad hasta Boqueixón.

Según la Guardia Civil, la banda llevaba a cabo los robos los días de apertura del ecoparque, es decir, los miércoles y los sábados. Estacionaban las furgonetas en la parte trasera del punto limpio, vigilando desde fuera mientras unos entraban por la fuerza al recinto, rompiendo la malla o saltando el perímetro. Su principal objetivo era sustraer material tecnológico y electrodomésticos.

Además, durante la investigación se descubrió que en ocasiones contaban con la colaboración de un empleado municipal del punto limpio, quien aparentemente recibía sobornos a cambio de facilitarles el acceso. Una vez cometidos los robos, la banda transportaba lo sustraído a una chatarrería en O Porriño para su venta, obteniendo beneficios que superaban los 16.000 euros en los meses de octubre y noviembre.

En la fase de explotación de la operación, cinco miembros de la banda fueron detenidos in fraganti durante otro robo con escalo. Durante la intervención, se les incautaron electrodomésticos, residuos y piezas metálicas, mientras que los demás fueron arrestados más tarde.