Un golpe decisivo contra la delincuencia ha tenido lugar en Galicia, donde la Guardia Civil ha desmantelado un grupo criminal que se había trasladado desde Madrid con la intención de realizar una serie de robos en vehículos comerciales. Estos elementos, que actuaban de manera organizada y rápida, han sido vinculados a un notable incremento de estos delitos en la región.

La operación, conocida como 'RENTRAP', se llevó a cabo el 22 de mayo y resultó en la detención de cinco individuos, cuatro hombres y una mujer, todos mayores de edad. Se les atribuyen al menos 23 robos en las provincias de A Coruña y Pontevedra, acciones delictivas que comenzaron el 18 de mayo en varios municipios, incluidos Santiago de Compostela y sus alrededores.

Las autoridades iniciaron su investigación ante el aumento alarmante de robos en furgonetas estacionadas, especialmente en áreas urbanas específicas. No pasó mucho tiempo antes de que los agentes identificaran un patrón, observando que los delincuentes se enfocaban en vehículos comerciales, principalmente furgonetas blancas de empresas de servicios como construcción y fontanería, que supusieron contenían herramientas valiosas.

El modus operandi del grupo consistía en romper ventanas o forzar cerraduras para acceder al interior de los vehículos. Se sospechaba que eran un equipo organizado y que habían llegado a Galicia a través de Ourense, utilizando una vivienda turística como base de operaciones y moviéndose en dos automóviles.

La rápida sucesión de robos —más de 20 en solo cuatro días— provocó una respuesta contundente por parte de las fuerzas del orden. Con la colaboración de la Comandancia de Ourense, los indiciados fueron interceptados en la Autovía A-52, cuando intentaban abandonar la región gallega.

Durante la detención, se hallaron en uno de los vehículos herramientas y otros objetos robados cuyo valor supera los 70.000 euros. Estos artículos fueron llevados al Acuartelamiento de Milladoiro para su identificación y futura devolución a sus legítimos propietarios.

A pesar de los avances, la investigación sigue en curso, ya que aún hay material sin identificar que podría vincular al grupo con más robos no denunciados. Además, uno de los detenidos enfrenta cargos por delitos contra la seguridad vial, dado que conducía sin haber obtenido nunca un permiso. Por su parte, otro implicado fue arrestado por usurpación de identidad, pretendiendo evadir la justicia utilizando los datos de su hermano debido a varias reclamaciones judiciales en su contra.

Los arrestados fueron trasladados a las instalaciones pertinentes para continuar con las diligencias, y los vehículos utilizados en la operación se encuentran ahora bajo custodia judicial. Todo el caso ha sido remitido al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Verín, a la espera de resoluciones que den fin a esta notable trama delictiva.