El Servizo Galego de Saúde (Sergas) ha puesto en marcha una licitación para garantizar las interrupciones de embarazo dentro del plazo establecido, debido a la imposibilidad de llevar a cabo todas las prácticas en el sistema sanitario público. El valor estimado de la licitación es de casi 1,4 millones de euros durante tres años, con la posibilidad de una prórroga de hasta cinco años, lo que supondría un aumento en el presupuesto.

De acuerdo con los pliegos publicados en la plataforma de contratación de la Xunta, la licitación se justifica por el aumento y la continuidad de la prestación asistencial, así como la falta de recursos materiales y humanos suficientes en el servicio sanitario. El objetivo es garantizar una prestación eficiente de acuerdo con la normativa vigente.

Además, se establece que los facultativos del sistema público tienen el derecho de ejercer la objeción de conciencia. El contrato tiene una duración inicial de tres años, con un valor estimado de 1.373.910 euros. Con las prórrogas y posibles modificaciones, el total ascendería a 2.564.632 euros. La licitación se divide en dos lotes que difieren en cuanto a las cantidades asignadas a cada área sanitaria.

El contrato cubre la consulta médica, las pruebas necesarias, la interrupción del embarazo, la recuperación y el seguimiento, así como las consultas ginecológicas necesarias. Las tarifas varían según si el aborto es farmacológico o con medios instrumentales.

Hasta ahora, el Sergas realizaba derivaciones a clínicas privadas de forma puntual, basada en la urgencia vital. Con esta licitación, se busca garantizar la prestación de asistencia sanitaria de manera eficiente y sin demoras.

El Sergas estima que esta licitación cubrirá alrededor de 805 abortos al año, la mayoría de ellos realizados con instrumental. Según un informe, entre 2020 y 2022 se practicaron un total de 10.515 abortos en Galicia, siendo el 64,32% realizados en el Sergas y el 35,68% en clínicas privadas autorizadas.

Las cifras varían según las áreas sanitarias, siendo el 100% de los abortos en Vigo realizados en la sanidad pública, mientras que en A Coruña solo representan el 36,47%. En Ferrol, Lugo, Pontevedra, Ourense y Santiago, la mayoría de los abortos fueron realizados en el ámbito público.