Feijóo asegura un gabinete inclusivo y aboga por una España con principios: "Ofreceré un gobierno digno".
El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha regresado a su Galicia natal justo antes del próximo congreso del partido, programado para julio. En este encuentro, se plantea un cambio significativo en la política, ya que Feijóo asegura que no será un mero trámite, sino que marcará un "punto de inflexión" en la dirección del PP. Su objetivo es consolidar un equipo inclusivo que evidencie que el cambio "vale la pena" y que se abrirá un nuevo periodo que aspirará a proporcionar a España un "gobierno decente".
Feijóo, que en el pasado solicitó "permiso" para dejar Galicia y asumir el liderazgo del PP a nivel nacional, se ha unido a la multitud en la romería de O Pino (A Coruña), donde estuvo acompañado por figuras relevantes como Alfonso Rueda, actual presidente de la Xunta, y otros altos cargos del partido. Más de 4,000 entusiastas se congregaron para apoyar su presencia en este evento popular.
Entre los vítores de sus seguidores, el líder del PP ha hecho un llamado a su militancia, expresando que su "deber" es volver a liderar el partido a nivel nacional. "He vuelto a Galicia para reiterar mi intención de seguir al frente del PP", declaró, resaltando que el cambio que surge de este congreso será más que un simple cambio de nombres.
Su discurso se centró en la necesidad de alterar el rumbo del país, dejando atrás épocas de degradación política y priorizando el interés público sobre el interés personal. "Es momento de enviar un mensaje a España: estamos listos para gobernar con sentido común y honestidad", afirmó con firmeza.
Un miembro de la audiencia se unió a las ovaciones, exclamando su apoyo a Feijóo. Este, agradeciendo el aliento, delineó su visión de un PP que se esfuerce por ofrecer un servicio genuino al ciudadano y que priorice un renacer moral en la política española.
En su intervención, Feijóo enfatizó la urgencia de regresar a principios de ética y moral en política. "Quien se aproveche de los recursos públicos debe ser castigado. Lamentablemente, hoy en día España carece de esa rectitud, con un gobierno sin valores ni rumbo", lamentó, describiendo el actual panorama político como uno plagado de escándalos y falta de compromiso.
Feijóo también subrayó que el gobierno central ha dejado de ofrecer soluciones y que, en realidad, representa el principal obstáculo para el bienestar de los españoles. "Un país no puede tener un gobierno que se preocupe únicamente por sus escándalos internos", concluyó, apuntando a la necesidad de un gobierno que esté a la altura de las exigencias de la población.
Advertido que esta situación no puede continuar, Feijóo insistió en que millones de ciudadanos merecen un gobierno cuya integridad esté garantizada. "La mayoría de los españoles son personas de bien, y merecen un gobierno que cumpla con esos estándares", aseguró, prometiendo que de ser elegido, ese sería el compromiso de su gestión.
Desde su perspectiva, la actual administración de Sánchez ha vaciado los recursos de los ciudadanos mientras favorece a los corruptos, augurando que el futuro con ellos solo traerá más de lo mismo. Desde su convicción, el pueblo anhela un cambio político y un nuevo gobierno caracterizado por la decencia.
"La ciudadanía se pregunta si es posible hacer las cosas de una manera diferente, con un líder y ministros honestos. La respuesta es un rotundo sí", sostuvo, sugiriendo que su modelo de liderazgo se apartaría de la división promovida por el gobierno actual.
En el evento de A Magdalena, evocó un recuerdo de hace seis años, subrayando que a pesar de los bajos resultados en elecciones pasadas, el PP ha crecido considerablemente desde entonces. "Nos propusimos alcanzar 10 millones de votos y tenemos un camino por delante para lograrlo. Vamos a gobernar", aseguró con determinación.
Feijóo resaltó que el Partido Popular tiene claros principios y valores, manteniéndose abierto a todos los ciudadanos y deseando construir un futuro en contraposición a un gobierno que, según su opinión, se encuentra en decadencia. "Es momento de poner fin a la oscuridad en la que estamos sumidos, ofreciendo claridad y metas concretas", instó.
Finalizando su discurso, el líder del PP se comprometió a escuchar a la ciudadanía, asegurando que sus decisiones serían tomadas con la conciencia de lo que el país necesita. "Crearemos un equipo en el partido y un equipo con todos los españoles, poniendo fin a esta decadencia", prometió, reafirmando su intención de llevar adelante políticas que beneficien a todos. "Cuando me comprometo, cumplo", concluyó, dejando claro su deseo de ser reconocido por sus logros pasados y su ambición por un futuro de éxito.