Crónica Galicia.

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Se fragmentará el último tramo de la autovía Santiago-Lugo para habilitar una sección este verano.

Se fragmentará el último tramo de la autovía Santiago-Lugo para habilitar una sección este verano.

El ministro de Transportes, Óscar Puente, ha logrado finalmente inaugurar el tramo Melide-Palas de la autovía Santiago-Lugo (A-54) después de siete largos años de obras y una inversión de 100 millones de euros.

En un acto realizado para marcar este hito, Puente anunció que se dividirán en dos subtramos los 16 kilómetros que conectarán Arzúa y Melide en A Coruña, permitiendo la apertura de una parte este verano. Se espera que los 94 kilómetros totales de la infraestructura estén finalizados para finales de 2025.

El tramo recién inaugurado, que une Melide con Palas de Rei, ha sido descrito como un logro significativo para mejorar la conectividad interna de Galicia por el ministro de Transportes.

El ministro informó a los alcaldes de Melide y Palas, así como al presidente de la Diputación de Lugo, sobre la intención de abrir un tramo entre Melide y Santiso este verano, abarcando unos seis kilómetros. Con esto, solo restarían 10 kilómetros para que la totalidad de la autovía esté operativa para fin de año.

Puente destacó que pese a los retrasos acumulados a lo largo de los años, el Gobierno socialista ha logrado poner en servicio la mitad de la autovía desde que asumieron el cargo en 2019.

En el evento de inauguración estuvieron presentes diversas figuras políticas, como la conselleira de Infraestruturas, el delegado del Gobierno y los presidentes de las diputaciones de A Coruña y Lugo, entre otros.

Tras siete años y medio desde la colocación de la primera piedra en 2017, el tramo Melide-Palas fue finalmente puesto en servicio, con una inversión de 100 millones de euros y una combinación de estructuras complejas a lo largo del trayecto.

La apertura de este tramo de la autovía busca mejorar la seguridad vial y agilizar el tránsito en la zona, especialmente para los peregrinos del Camino de Santiago que atraviesan el área de Melide.

Una vez completada la autovía en su totalidad, se espera que el tiempo de recorrido entre Santiago y Lugo se reduzca a la mitad, beneficiando así a los conductores que utilizan las rutas actuales de la N-547 y la A-6.

El ministro aprovechó la ocasión para recordar el papel del exministro José Blanco en el proyecto, destacando la importancia de la inversión y el tiempo requerido para llevar a cabo infraestructuras de esta envergadura en regiones como Galicia.

Puente también hizo hincapié en las medidas implementadas para garantizar la fluidez del tráfico en Melide y en la importancia de la colaboración entre administraciones para el desarrollo de nuevas infraestructuras en la región.