La Audiencia Provincial de A Coruña, con sede en Santiago de Compostela, se prepara para llevar a juicio el próximo viernes 13 de diciembre a un individuo acusado de robar un vehículo, presuntamente con la intención de adquirirlo. Este acontecimiento estuvo marcado por una espectacular fuga a alta velocidad por la autovía A-6, que culminó en una colisión con un coche de la Guardia Civil.

Según el informe presentado por la Fiscalía, que reclama para el acusado penas que superan los 13 años de prisión, los hechos tuvieron lugar en febrero de 2019. En esa ocasión, el acusado se presentó en un encuentro con otro hombre en la explanada de Salgueiriños, en Santiago, con el objetivo de ver un Audi A3 que supuestamente deseaba comprar.

Sin embargo, el encuentro dio un giro inesperado cuando, en un acto delictivo y con clara intención de apoderarse del vehículo, el acusado tomó las llaves del coche al propietario y lo puso en marcha, llevando con él a toda velocidad. En su desesperada fuga, estuvo a punto de atropellar al propietario, quien, para evitar el impacto, tuvo que zafarse y terminó golpeándose contra la acera, sufriendo lesiones en el proceso.

Transcurridas unas horas, el vehículo robado fue localizado en Madrid por una patrulla de la Guardia Civil, que lo interceptó mientras este circulaba a gran velocidad por la A-6, ignorando completamente las órdenes de los agentes para que se detuviera.

La persecución comenzó cuando los agentes de la Guardia Civil siguieron de cerca el coche conducido por el acusado, quien continuó su marcha a gran velocidad a lo largo de la A-6, iniciando desde el kilómetro 25 hasta el 5,5. Esta conducta imprudente no solo fue irresponsable, sino que también puso en serio peligro la vida e integridad de otros usuarios de la vía. Al aproximarse al kilómetro 6 de la autovía, el acusado intentó girar hacia la calle Sinesio Delgado. Sin embargo, los agentes lo alcanzaron ya que se vio obligado a frenar debido a la presencia de otros vehículos en un tramo del túnel. Fue en ese instante, al encontrarse junto al coche policial, cuando el acusado embistió intencionadamente el vehículo de los agentes.

El desenlace se produjo cuando el acusado chocó contra un muro de hormigón a la derecha de la calzada, dejando ambos automóviles inmovilizados. En este punto, un agente salió de su vehículo y trató de arrestar al sospechoso, quien intentó nuevamente escapar, poniendo en marcha el coche y tratando de atropellarlo en su huida. Finalmente, el acusado fue detenido tras retroceder unos metros y salirse del camino.

La Fiscalía considera que los actos del acusado constituyen un delito de robo de vehículo en concurso con un delito de lesiones, además de dos delitos contra la seguridad del tráfico por conducción temeraria. Asimismo, se le imputa un delito de atentado y dos delitos de conducción sin el permiso correspondiente, ya que el acusado carecía del carné de conducir.