Crónica Galicia.

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Contas insta a la Xunta a evaluar la brecha digital para garantizar una distribución justa de recursos en las escuelas.

Contas insta a la Xunta a evaluar la brecha digital para garantizar una distribución justa de recursos en las escuelas.

La reciente investigación del Consello de Contas subraya la importancia de abordar la brecha digital en el ámbito educativo, centrándose en las verdaderas necesidades de los colegios, en lugar de limitarse a aquellos que participan en programas específicos. Este enfoque busca asegurar que todos los centros sostenidos con fondos públicos reciban los recursos necesarios para una digitalización efectiva.

En un informe elaborado recientemente, se solicita a la Xunta de Galicia llevar a cabo un análisis estadístico detallado que permita una planificación más efectiva en la distribución de dispositivos electrónicos. La idea es evaluar la situación actual de todos los colegios, tanto públicos como concertados, y asegurar que cada uno de ellos tenga acceso a la tecnología necesaria, sin importar su participación en iniciativas como Edixgal o Educa en Digital Galicia.

El documento, consultado por Europa Press, destaca que la Xunta debe considerar varios factores a la hora de realizar este estudio, entre ellos el número de equipos disponibles por cada nivel educativo y su situación actual en cada centro. Esta evaluación es fundamental para que ninguna institución quede rezagada en el proceso de digitalización.

El Consello de Contas enfatiza la obligación de enfrentar la brecha digital atendiendo a las “necesidades reales” de cada escuela, despojándose de criterios que favorezcan solo a quienes forman parte de programas previos relacionados con la educación digital. Se resalta que los alumnos en situación vulnerable, que asisten a centros no incluidos en iniciativas digitales, continuarán sin los recursos necesarios a menos que se cambie la estrategia de distribución.

El informe también menciona que la entrega de dispositivos móviles, parte fundamental del programa financiado por fondos europeos, se ha limitado mayormente a ciertos colegios, dejando a otros sin soporte. A través de diferentes líneas de distribución, se han proporcionado dispositivos adicionales a aquellos que ya participaban en programas educativos como Edixgal y Educa en Digital Galicia. Sin embargo, se observa que los programas exclusivos para escuelas públicas, como las Aulas Móviles, han creado desigualdades en el acceso a la tecnología.

Además, el análisis de vulnerabilidad del alumnado señala que las deficiencias en la planificación inicial han obstaculizado el acceso de estudiantes en situaciones precarias a los dispositivos necesarios. Como resultado, muchos de estos alumnos siguen enfrentando las mismas desventajas que antes de la implementación de las políticas de digitalización.

A pesar de que el informe reconoce que la planificación ha cumplido algunos de sus objetivos, lo hace de manera parcial. Los centros tienen la posibilidad de solicitar equipos para reducir la brecha digital, pero el avance no es suficiente si consideramos la magnitud del problema.

En cuanto a la capacitación docente, el Consello de Contas destaca que, según encuestas realizadas a 250 centros, la formación técnica se ha llevado a cabo antes de la instalación de las aulas. Esto contraviene el requisito del programa de que dicha formación debe ser posterior y centrada en el uso de las nuevas tecnologías.

Frente a esto, se recomienda a la Xunta que asocie los planes de capacitación del profesorado a una financiación específica y que respete las condiciones dictadas por cada programa educativo.

A pesar de las observaciones y recomendaciones del informe, se indica que en términos generales, las instituciones educativas están satisfechas con el programa #EcoDigEdu y que, hasta el 31 de diciembre de 2024, se considera que el progreso es "satisfactorio". No obstante, es imperativo que la Xunta continúe implementando las medidas necesarias para alcanzar los objetivos establecidos.

Finalmente, se señala que la Xunta no ha presentado ningún tipo de alegación al respecto del informe, lo que puede interpretarse como un respaldo tácito a las propuestas y líneas de acción recomendadas.