Crónica Galicia.

Crónica Galicia.

"Nuevo brazo móvil facilita la contemplación de reliquias y pinturas en Santo Estevo"

En el corazón de la Ribeira Sacra se encuentra el monasterio de Santo Estevo de Ribas de Sil, un lugar lleno de historia y misterio. Según la leyenda, nueve obispos descansan en paz en este lugar sagrado, con sus anillos episcopales guardados en una caja de plata.

Este mito se convirtió en realidad a finales del año pasado, cuando durante unos trabajos de restauración se descubrieron los anillos en una bolsa de tela en los relicarios laterales de la iglesia. La restauradora Vania López, al frente de la restauración, ha liderado la labor de preservar estos tesoros históricos y permitir que sean admirados junto con las pinturas murales del siglo XV y XVI que también se encontraron en el lugar.

Para lograr este cometido, se ha implementado un mecanismo especial en colaboración con la Diócesis de Ourense, permitiendo que los relicarios y las pinturas se puedan disfrutar simultáneamente. El ingeniero Alfredo Díaz y el arquitecto Fernando Bonrostro han sido clave en el desarrollo de este proyecto único, que combina la estética con la técnica para preservar el patrimonio sin dañar el entorno.

El mecanismo móvil diseñado es manual, evitando el uso de motores u otros elementos que puedan afectar al entorno. Este enfoque meticuloso ha sido posible gracias a la financiación de la Fundación Iberdrola, que ha permitido llevar a cabo esta importante labor de preservación del patrimonio cultural.

El siguiente paso para la restauradora Vania López es completar la restauración de la cabecera y el retablo mayor, una obra del reconocido Juan de Anges. A pesar de no encontrar más pinturas murales detrás del retablo, López espera que este proyecto despierte el interés de historiadores y expertos en arte, destacando la importancia de este enclave en la Ribeira Sacra.

Con esta restauración, Santo Estevo de Ribas de Sil aspira a ser reconocido como Patrimonio Mundial de la Humanidad, una distinción que sin duda haría justicia a la riqueza histórica y cultural de este lugar extraordinario.