En un intenso debate celebrado este miércoles en el Parlamento de Galicia, el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, acusó a los líderes de la oposición de instrumentalizar la reciente denuncia de agresión sexual contra Alfonso Villares, antiguo conselleiro do Mar. Rueda afirmó que esta utilización de la situación es "partidista", desviando así la atención de la gravedad del asunto.

Durante la sesión, tanto Ana Pontón, portavoz del BNG, como José Ramón Gómez Besteiro, secretario general del PSdeG, aprovecharon la ocasión para criticar lo que consideran un "silencio indigno" por parte del presidente. Esta reacción se produce luego de que la denuncia de agresión sexual y la consiguiente dimisión de Villares hayan acaparado la atención mediática desde la semana pasada, convirtiéndose en uno de los temas centrales del pleno.

Rueda, en defensa de su postura, también trajo a colación otros escándalos de corrupción relacionados con la oposición, específicamente aquellos que afectan a figuras como el exministro socialista José Luis Ábalos y su asesor, Koldo García. El presidente cuestionó la moral de quienes critican su silencio, recordando que ellos mismos habían estado involucrados en situaciones de controversia sin ofrecer respuestas claras.

El líder gallego hizo hincapié en la importancia de la presunción de inocencia, remarcando que el PSdeG había tenido un líder que se vio obligado a dimitir en 2016 debido a imputaciones por diez delitos, todos los cuales fueron finalmente archivados. Con esto, Rueda busca posicionarse como un defensor de los principios de justicia y equidad, en un clima de creciente tensión política.