Un empresario vinculado a una empresa de grúas de Redondela ha llegado a un acuerdo judicial que incluye una pena de un año de prisión y la obligación de abonar 55.000 euros como indemnización, tras la trágica muerte de un operario ocurrido en su primer día laboral.

El trágico suceso tuvo lugar el 17 de julio de 2023, cuando el trabajador fue asignado a la tarea de transportar un vehículo averiado hasta un concesionario. Durante la operación, estacionó la grúa en una pendiente y, después de asegurar una de las ruedas delanteras, comenzó a desplegar la rampa.

Ese movimiento generó un desequilibrio en el vehículo, provocando que la rueda se descalzara y la grúa se moviera. El operario, que se encontraba en un lateral, no pudo evitar ser impactado por el vehículo, lo que resultó en su lamentable fallecimiento al ser aplastada su cabeza.

Las autoridades judiciales imputaron al empresario un delito contra los derechos laborales, sumado a un homicidio por imprudencia grave. La Fiscalía consideró pertinente aplicar una atenuante de reparación del daño, dado que el acusado había consignado los 55.000 euros antes del juicio para indemnizar a la familia del difunto.

Durante una audiencia en el juzgado de Vigo, el empresario reconoció su responsabilidad en los hechos y aceptó tanto la pena de prisión como la obligación de cubrir la responsabilidad civil. En la sentencia, se señala que el trabajador no ejecutó correctamente la maniobra para retirar el automóvil de la grúa, ya que solo calzó una rueda delantera, lo cual se atribuyó a la falta de formación e información proporcionada por la empresa sobre el manejo del equipo y la prevención de riesgos laborales.